Return to innocence


Entre la melancólica armonía de una harmónica, sentada en el sillón y escuchándolos tocar, después de una larga charla, sentados en una plaza, sobre las oportunidades que cada uno decide dar, y decide darse y recordando alguna letra que dice “¿Cómo?, ¿cuándo? y ¿Por qué? Son demasiadas preguntas para hacerle al destino” pensé que ya había dado demasiadas y que nadie me había dado una a mí, anoche (amanecer), con lágrimas en los ojos, decidí/mos que nunca eran demasiadas cuando se quería con el corazón algo. Si estamos dispuestos a lograrlo, nunca faltará una palabra de aliento y por más que sea la utopía más grande que pueda existir somos capaces de convencernos de que se puede.
Sabes que si; porque tratas de convencerte, que vas a tratar hasta el cansancio, porque me prometiste que ibas a estar cuando tuviera que levantarla, porque ninguno de los dos pudo convencerse de que no quiere ayuda, y aunque no la quiera, dijimos, que se la íbamos a dar igual porque la necesitaba, y porque tenía que aprender a hacerle frente a los problemas, que el camino que a veces tomaba no era el correcto y que tal vez, nosotros, podíamos enseñárselo, porque la oportunidad la tiene ¿la querrá tomar?
No se lo merece, no te lo mereces.
Y tal vez, nosotros tampoco nos merezcamos lo que nos pasa, cada uno carga con su mochila, tratando de entender en que lugar la cargamos tanto y por qué decidimos seguirla cargando de cosas que tal vez no nos hagan bien del todo NO NOS LLENEN , NO NOS COMPLETEN (pero es lo que nosotros elegimos), porque a vos tal vez te consuele el poderla abrazar y a mi verla sonreír, se que quisieras ser dueño de un poco más, que tal vez tendrías que haber pedido una factura contra reembolso, pero es lo que vos elegiste, y te pone orgulloso saber que lo ténes al lado tuyo, que de una manera u otra lo conseguiste que la espera como vos decidís muchas veces valió la pena, y que a mi me llene pensar que tal vez algún día, esos pensamientos que decidieron cruzarse por mi cabeza se conviertan en realidad, pero la espera, querido, no es para mi, ya espere demasiado, y tal vez no sea él que yo necesito pero es él que a mi me gustaría tener ahora , porque sabes que si las cosas hubiesen pasado antes, todo sería muy distinto, pero no me engaño fue, fue.
NO tiene explicación, no la tiene, y se ve q este cuaderno q me prestaste, me ayudo a dejar de pensar y hoy lo decidí fue, como apreció él (y no me preguntes pq su “nombre”, su “presencia” decidió ocupar un poco más de tiempo en mi cabeza)
Me convencí, Me convencí, así como vos te convenciste que tarde o temprano iba a cambiar o lo va a ser “si va a ser, será en su momento” canté.
Me olvide, nunca lo conocí.
Por que lo vas a lograr, por que tenes todas las esperanzas puestas en eso y por que la querés con coraje.
Y por que si llegamos a los 50 y estamos solos, nos vamos a casar, ¬¬ y por que no tuvimos resaca, y porque entre el reggaeton, la salsa, y cuba, me olvide y vos reafirmaste tu confianza.

12, 13 de octubre 2008

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