Contradicciones Civilisticas.

Extrañar y necesitar no son, ni serán jamás la misma cosa; la 1º hace alusión a un sentimiento, la 2º a una necesidad.
El sentimiento, llega, esta un rato, y luego se va.
La necesidad en cambio (como necesidad que es) debe, ser satisfecha, ya sea por una prestación tendiente e idónea a tal fin, a la que podríamos denominar cumplimiento específico cuando es realizada por la persona a quien uno necesita; o en caso de obtener la negativa o el incumplimiento defectuoso, por vía de un sustitutivo (es allí donde aparecen las miradas cómplices con personas que hacen lo mismo que usted y estudian en la biblioteca, o comienza a desenterrar, investigar la vida de personas que usted creía muertas y enterradas, a la que comúnmente denominamos "ex")
Pero la confusión entre extrañar y necesitar (no es un modo extintivo de este contrato típico que usted creyó celebrar en reciprocidad con la otra persona, pero que al fin y al cabo termina dándose cuenta de que (locura de por medio) el agua que debe pasar debajo del puente para que la reciprocidad se produzca es ¡equivalente a la contenida en una repesa!) la confusión provoca LOCURA, la insanidad total y absoluta, que en ciertos intervalos lúcidos llevan a preguntarse cómo era uno antes de celebrar este contrato, cómo era y por qué terminó siendo lo que es en el hoy por hoy. De independencia no hay ni rastros, como no la había en nuestro país hasta 1810/1816, ¿de libertad? ¡tampoco! (albedriamente coartada) porque el pensamiento no esta restringido de manifestarse por el medio a que uno lo reprimieran o lo hicieran desaparecer como en la década del '70 ¡NO! se encuentra restringido porque no hay más capacidad neuronal para inventar, suponer o sacar de la galera más hipótesis de las que han pasado por él, tratando de encontrar una "aparente" solución (que no la es, por más de que aparezca ostensible), no la hay, y aún ello lo restringe sabiendo de buena y plena fe, que la única solución es la de dejarse de pensar, esperar y añorar (no digo de extrañar y de necesitar) y poner el pensamiento en donde debe ser ubicado, por qué, porque la persona con la cual usted se sentía en reciprocidad lo ha logrado, cuando usted era quien aseveraba poder hacerlo (¿podía hacerlo de verdad?)
Deje de pensar que hay acciones posesorias a su favor y tendientes a recuperar lo perdido, porque no las hay y solamente hay un instrumento para ello y se llama TIEMPO. Pero lo que si tiene son derechos personalísimos que le corresponder por su calidad inherente de persona con existencia natural y visible, como el derecho (no se lo AUTO-RESTRINJA) a tener fluidez de oxigeno en el cerebro y sobretodo a ser FELIZ, a no vivir en constante espera, porque no puede vivir toda la vida esperando, un día mejor para decir las cosas,o a que él se le pasa vaya a saber que es lo que tiene en la cabeza, o a que le escriba un mensaje para aunque sea decirle que hoy comió y fue al baño ¡como todos los días! NO PUEDE NO TIENE DERECHO A ESE TIPO DE ESPERA.
Pero a su vez, utilice la inteligencia que alguien puso en su cerebro y sepa respetar el tiempo de los demás, así como los sentimientos de los demás, porque son tan humanas como usted, tienen tanto corazón y neuronas como usted, y que probablemente esten esperando lo mismo que usted espera de ellos... respételos es un derecho personalisimo de ellos.

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